La incongruencia de Belinda.

La semana pasada se armó un zafarrancho entre la prensa, Belinda y el productor Odiseo Bichir durante el estreno de la obra “El Knack” el arte de la seducción, los reporteros se comportaron pésimos ( y unas gatisimas)  al interrumpir la función para conseguir algunas declaraciones de la cantante. Fue una falta de respeto tanto para el público como para el actor.

Belinda estaba en su derecho de dar o no declaraciones en el momento adecuado, sin embargo es bien sabido por todos que a la intérprete de Dopamina no le gusta ser cuestionada sobre su vida personal, pero lo que si le gusta es ser seguida por una cámara las 24 horas del día para mostrar sus actividades cotidianas; entrevistas, sesión de fotos y hasta se podrá ver imágenes de Belinda aventándose de un paracaídas y por su puesto detalles de su vida personal… si… ante las cámaras de Cosmopolitan TV si hablará.

Como pretende Belinda abrir su vida personal en un reallity show y con la prensa todo lo contario. No me salgan con que en el pedir está el dar, porque también los reporteros en ocasiones suelen ser amables todo depende del buen trato que se tenga entre ambos.

Una figura pública está expuesta a estas situaciones y cuestionamientos, que se pueden responder de diferentes maneras, pero una vez que revela detalles de su vida personal la puerta ya no se puede cerrar.

Belinda no es la única incongruente en el medio artístico, es cuestión de ver las portadas de las revistas y ver aquellos famosos que venden las fotografías de su boda, el bautizo o nacimiento de sus hijos… luego no se quejen cuando el niño crezca y la prensa lo acose, si desde sus primeros días de nacido estuvo involucrado en los medios, todo por haberle puesto precio a un momento íntimo y familiar… Así que acepten las consecuencias.